Beneficios de la biomasa si se la compara con combustibles fósiles como el petróleo.
Los combustibles fósiles como el gas, el carbón o el petróleo se están agotando. Los expertos creen que las reservas de este tipo de combustible durarán 40 o 50 años más, por lo que debemos reducir cuanto antes nuestra dependencia a ellos.
Además, este tipo de combustibles dañan el medio ambiente y contribuyen al calentamiento del planeta, lo que deriva en problemas que afectan a nuestra vida cotidiana, como la contaminación, la lluvia ácida o posibles vertidos.
El petróleo está presente en muchos aspectos de nuestra vida, tanto en los combustibles, como en materiales como plásticos o tejidos. Actualmente, se utilizan unos 95.590.000 barriles de petróleo al día en todo el mundo. Este material es contaminante tanto en su producción, en su transporte y en su uso. Uno de sus principales problemas es que libera una gran cantidad de CO2 al ser quemado, y esto incide en la salubridad de nuestra atmósfera. Además, el petróleo no biodegradable, por lo que puede tardar muchos años en descomponerse, causando problemas graves a la fauna y la flora de nuestro planeta.
Durante la producción del petróleo se producen una serie de residuos que muchas veces son desechados sin seguir unas normas de seguridad ambiental. A este problema podemos añadir el del transporte, que se realiza en grandes barcos petroleros que transportan cantidades enormes de este material y que corren el riesgo de sufrir un accidnete marítimo. Si recordamos desastres petroleros como el del Mar Egeo o el Prestige, las consecuencias para el medio ambiente son desastrosas.
Una buena alternativa ante los problemas que genera el consumo de petróleo es optar por una energía más limpia, económica y no perecedera. La biomasa nos ofrece estas tres características, lo que la convierte en una buena alternativa para la obtención de energía limpia y eficiente.
La biomasa puede aprovecharse mediante la instalación y uso de aparatos de consumo doméstico como calderas de biomasa o estufas de biomasa. Con estos aparatos, podemos contribuir al desarrollo medioambiental y ahorrar en energía para nuestro hogar.
Este tipo de calderas de biomasa pueden utilizar diferentes combustibles para la generación de energía. Así, podemos obtener calderas de pellets, estufas de leña o calderas de policombustible, por ejemplo. Su gran variedad nos aporta un beneficio extra, pues podremos escoger la que más se adapta a nuestras características.
Un buen asesoramiento en el campo de las calderas y estufas de biomasa es muy importante para entender los beneficios que nos trae la utilización de la biomasa como forma de obtención de energía. Contacta con empresas especializadas en calderas y estufas de biomasa para elegir la tuya.